miércoles, 6 de julio de 2011

Ya ni la musica responde. Debe ser porque ese invento de mierda del CD nunca prosperó, siempre fue un objeto desechable, como esas amistades que no sirven mas que para tomar un copete o para pedirte favores.
Ya nada puede parecer mas desmotivante.
La huea resulto ser bien simple. Las palabras de verdad se las llevo el viento y lo unico que queda ahora es buscar un sentido de porque hacer las cosas, mas que para quien las haces.
Si alguien se decepciona no sera la primera vez

viernes, 22 de abril de 2011

No se entiende la estupidez de la gente que no quiere vivir su vida alejada de sus miedos

alejada de su dinero y de su television con noticias amarillistas que no hacen mas que contaminar las mentes

de aquellos que aun creen que la vida tiene que ser como muestra la cajita del diablo.


Por mi que se jodan los que quieren tapar el sol con un dedo y tambien los que tienen respuestas para todo

domingo, 5 de diciembre de 2010

No Acepto



“No Acepto”

Ensayos sobre el Bicentenario
¿Qué celebramos?



  



28 de octubre de 2010, Puerto Montt


 “…no hay nada que festejar…” cantan los Cadillacs en la canción V centenario del disco vasos vacíos, cuando al abrir la ventana  de mi casa veo desde autos hasta la fachada de una casa pintada completamente de blanco, rojo y azul. Todo esto en el contexto de una celebración que tiene más de desahogo de la clase trabajadora por los días de fiesta, que por los motivos históricos que podrían ameritar una celebración de cuatro días.

Ahora revisando mis cuadernos quiero ver como empezó todo esto y a la vez opinar, de que es lo que significa el bicentenario para Chile.

El comienzo

Estado, nación y territorio son los elementos de coerción para hacernos chilenos, junto a ello, desde pequeños se nos hace rendir honores a muchachos que han muerto a causa de sistemas ideológicos gobernantes y que ahora son tratados como héroes y mártires de batallas dirigidas en base a ambiciones políticas, económicas y militares. Lo que demuestra que lamentablemente la historia de Chile ha sido construida sobre un pantano de sangre y cadáveres, que ha pasado a llevar a lo más esencial de un país: su gente.

Y es que el estado de chile nace en base a una mística de los sectores más conservadores de la sociedad quienes pretenden darle sentido de identidad al territorio que lograrían gobernar.
Sin embargo el Chile actual que hoy conocemos, estaba lejos de conformarse como tal, pues aspectos como la distancia y las diferencias en las condiciones de vida marcaban la tónica de las ciudades y localidades extremas que no eran parte del país. De hecho, si es que nos ponemos a observar en la actualidad ésta sociedad habitante de un “territorio” en común tiene más diferencias que cohesión entre sus mismos habitantes, ya que las culturas de un extremo a otro están lejos de ser parecidas, pues lo único que parece hacernos iguales es mantener un lenguaje, tener un “pasado en común” (gracias a la historia tradicional y elitista) y habitar los limites de un territorio que solo está delimitado en los mapas. Hace 200 años lo que hoy en día es la llamada republica de Chile no era más que un espacio en blanco con pequeñas grietas unidas en torno a una idea de nación.

Y es que esta idea de nación fue formada a mediados del XIX, por la necesidad de liberación económica para una mayor acumulación de riqueza de las elites locales, todo escondido bajo un discurso  y un proceso de “independencia” frente al imperio español en ese momento debilitado por las invasiones sufridas durante la era napoleónica.

Es así como triunfa la libertad de comercio y propiedad en Chile, todo por sobre otras libertades cívicas, por lo que Marx podrá estar feliz en su tumba al darse cuenta que su interpretación sirve hasta para este caso, pues el cambio económico moldea el cambio de la sociedad chilena durante la primera mitad del siglo XIX y lleva a que los propietarios a cargo de la mano de obra se enriquezcan a medida que avanzan y se revolucionan los medios de producción.

Ahora cabe mencionar que durante ésta época, el periodo de emancipación contra la corona está lejos de ser una realidad sólida y constante, pues al revisar la historia podemos ver que con el correr de los años y hasta en la actualidad, aquel estado de independencia es más dependiente que nunca de las inversiones españolas, dueñas de los principales capitales en los sectores de agua, luz, gas, empresas constructoras, financieras, telefónicas, de salud entre otras, que hacen que España sea en la actualidad el segundo máximo inversor en el país y de una u otra forma mantenga el titulo de madre patria (Económica) del país.

Ahora volviendo al tema de cómo se va formando el país, en aquella época la mejor forma de hacerlo fue en torno a la educación de la población, la cual estuvo a cargo de extranjeros contratados para fomentar la idea de pertenencia a un territorio y a un estado determinado. Cabe mencionar que este proyecto no fue de tipo popular, por lo que queda reflejada la marginación del grueso de la población en un proceso que fue ordenado y centralizado, que abarco el periodo desde 1810 hasta 1870, y que  de paso discrimino a los pueblos nativos desde un comienzo y de paso exaltó las  figuras de personajes militares y aristocráticos, hoy en día considerados “héroes”, “libertadores” o “padres de la patria”.

Todo este proceso dirigido por la aristocracia mediante la razón o la fuerza, tuvo por objetivo sostener las bases del estado actual, pero si lo pensamos bien el estado no es mas que una institución que defiende sus intereses de clase política en base a normas, constituciones, incisos, artículos, reglamentos, jueces, legisladores, parlamentarios, senadores, ministerios, presidentes, etc, etc, etc, y toda una serie de elementos, individuos y aparatos “legales” que encierran a la sociedad dentro de un saco en el que nunca pidió estar. El sujeto popular no construye el estado ni el aparato administrativo, ni el aparato judicial que lo encarcelará. Lo hace la aristocracia local que pese a estar sujeta a una idea de nación, no deja de tener diferencias políticas y económicas al interior de ella  misma(pipiolos y pelucones, liberales y conservadores, concertacionistas y aliancistas), pero que en el fondo no representan otra cosa que el hambre de poder de un mismo linaje.

Estos grupos de poder comienzan a expandirse como cualquier peste que azota a una ciudad y van formando aristocracias locales en las primeras ciudades en las que se van formando asambleas con el fin de crear un mundo cívico que garantice la soberanía del estado en todo el territorio. Todo este proceso va de la mano con el poder de las fuerzas militares, pues como hemos visto a lo largo de la historia, el poder sobre éstas asegura el éxito político de los conglomerados.

Es así como se alza el estado a lo largo de territorios que hasta ese momento si quiera conocía, desde ahí comienza un proceso de cambio que incidiría directamente en la forma de vida de los individuos que hasta ese momento no tenían mas patria que sus familias y su tierra (entendida como la zona en que habitaban).

Con la construcción y soberanía del estado comienzan los problemas, pues la clase política se encuentra alejada de las clases populares y se tiende a activar medidas alejadas de su realidad social.

Ya lo reclamaron los primeros trabajadores protagonistas de la primera huelga general de chile en 1890, a causa de las malas condiciones de vida, sumado a la inoperancia de los gobiernos que se ocupan más de discusiones que de llevar a cabo acciones políticas. Así podemos ver que pasados poco más de cien años las cosas siguen siendo muy parecidas a lo vivido a fines del siglo antepasado.

Es así como el sistema político se impone desde un comienzo, dirigido por aristócratas o militares, quienes gobiernan en base a una democracia muy restringida y subordinada a sus intereses (hecho que se puede comparar a la actualidad). De esta forma el estado político ha sido formado de manera unitaria, centralizada y organizada en base a relaciones jerárquicas, en las que el gobierno impone las decisiones y acciones sobre sus ciudadanos.

Sin embargo si reflexionamos un poco nos podemos dar cuenta que el poder que tienen las instituciones del estado de Chile es intangible y solo puede ser manifestado cuando sacan a la calle a sus fuerzas armadas y de orden.

Pero a veces ni siquiera con eso ha sido capaz de demostrar su soberanía sobre las personas y el territorio, pues el estado de Chile ha mostrado ser incapaz de sostenerse frente a las decisiones extranjeras que han intervenido en los cambios políticos o militares del país. Que mejor prueba que la intervención de Nixon y sus agencias a la hora de realizar el golpe de estado en Chile, o la intervención “divina” del papa Juan Pablo II para detener en el último minuto la guerra entre Chile y Argentina o para retroceder aun mas en el tiempo, el bloqueo económico al salitre impuesto por los Estados Unidos a Chile durante fines del siglo XIX.

Es por esto que en esta celebración del bicentenario cabe preguntarse si es que acaso ¿es un hito que viene a celebrar el inicio del país como una nación independiente? Si fuese así, cabe preguntarse ¿cual es el motivo de celebración? si sabemos que desde el agua hasta los bosques son parte del patrimonio de empresas extranjeras que vienen a producir riqueza a costa del suelo nacional. Mas es el asombro al descubrir (por medio de la misma historia), que este proceso de extracción y explotación de recursos por parte de extranjeros se remonta a poco más de dos siglos.

Hoy me sorprende revisar las causas y motivos de celebración de éste bicentenario. El gobierno de turno nos dice que debemos celebrar que el país rescata valora y respeta sus identidades, como eje de su patrimonio cultural, cuando en realidad muchas comunidades nativas opinan que el estado las utiliza solo como parte de su folclor nacional, pues ellas mismas hasta antes de la creación y formación del estado chileno, gozaban de soberanía, territorio y una organización propia que no estaba designada por parámetros ni influencias ajenas a las de sus raíces familiares o de comunidad.

Otro elemento con el que se nos hace celebrar hasta quedar tirados en alguna ramada, tiene que ver con la suerte de vivir en un país [1]libre y democrático” que “promueve la participación, expresión y dialogo de sus ciudadanos”, cuando si bien no nos podemos quejar de vivir en un régimen sumamente represivo, tampoco vivimos en una sociedad que abra las puertas a la participación política de sus habitantes, pues en la actualidad, si no se proviene de una familia aristocrática con pasado político o con distinción económica, difícilmente uno podrá hacer otra cosa mas que ir a votar cada cuatro años por el mandamás de turno.

Otro aspecto es la libertad de expresión en un país que ahoga las libertades públicas, llevándolas al límite de lo permitido, si no que lo digan los cientos de jóvenes que han sido detenidos o victimas de algún montaje policial, abuso de poder o atropello por parte de alguna autoridad educativa, política o legisladora.

Pero al parecer nada de eso importa, pues celebramos que [2]“somos un país diverso e integrado que promueve la cultura de la tolerancia y la no discriminación, los diálogos interculturales y la inclusión de las comunidades discriminadas”. Cuando en realidad el grueso de la población no puede vivir sin marginar a sus vecinos peruanos, bolivianos, argentinos, inmigrantes, indígenas o discapacitados que viven en su misma tierra. Todo esto alimentado por sentimientos nacionalistas con más sentido chovinista que integrador de una sola comunidad de personas.

Pero no importa porque  celebramos que somos “Un país socialmente equitativo y solidario que promueve la igualdad de oportunidades y desarrolla las capacidades para la autopromoción social”[3].

[4]“No me alcanza con el sueldo de presidente” ($7.673.910 brutos al mes)
Sebastián Piñera. “27 de enero del 2010

Total, el presidente gana alrededor de 44 veces más que el trabajador que recibe el sueldo mínimo y pareciera que a nadie le importa que vive en uno de los países que reparte de peor forma la riqueza que sus mismos habitantes producen.

“Quiero decir directamente que (un sueldo mínimo de) 185 mil pesos es mucho”
Felipe Larraín, 15 de junio de 2010

Sin duda la clase gobernante es ajena al vivir de la población en general, pero nada de eso importa porque estamos celebrando que en Chile “se promueve la igualdad de oportunidades”[5]. Esa misma igualdad que no la ven las universidades a la hora de escoger entre un esforzado estudiante de escasos recursos contra el hijo de algún empresario que tiene el futuro asegurado. Tampoco la ve la sociedad a la hora de seleccionar para el puesto de trabajo a una persona mayor de 40 años de edad, ni menos la ve en las personas con apellidos ni color de piel distinto al del estereotipo que nos ofrece la publicidad.

Este es el Chile que vive “en armonía con el medio ambiente” y que “promueve el respeto y amor por los animales y la naturaleza en general”[6], siendo que las empresas forestales están explotando la tierra y devastando las otras especies de vegetación. Caso aparte es la destrucción del fondo del mar por parte de las industrias salmoneras, que no dejaron otra cosa más que gente endeudada, desempleo y sus jaulas abandonadas en las costas de la región.

Ese es el Chile que celebramos, el jaguar de latino América, sigamos celebrando, que siga el circo, le digo a usted, si a usted que está leyendo siga creyendo el cuento, que mientras el pequeño grupo que se lleva mas del 70% de la riqueza para su casa planea como manejar nuestras vidas, nosotros nos ahogamos en el pantano que nos deja sin mas alternativa que servir a las 13 familias que han gobernado lo que hoy consideramos un país “en desarrollo”

El Final

El estado y su proceso de consolidación nos han demostrado que a lo largo de su historia, no es más que un espejismo de lo que el eslogan del bicentenario nos quiere hacer creer.

[7] “…Chile no es la copia feliz del edén…”



Sin ánimo de polemizar
Atte.
Nicolás Barría Pérez

Telefono: 89773910
Correo: nicolas77_uch@hotmail.com


[1] ¿Qué es el bicentenario? – Portal web: www.chilebicentenario.cl – Fecha: sin especificar
[2] ¿Qué es el bicentenario? – Portal web: www.chilebicentenario.cl – Fecha: sin especificar
[3] ¿Qué es el bicentenario? – Portal web: www.chilebicentenario.cl – Fecha: sin especificar
[4] Casa de citas, Sueldos que no alcanzan – 17 Junio 2010 - Portal web: www.theclinic.cl
[5] Reunión Hacienda – CUT – Felipe Larraín: Un salario de 185 mil pesos es mucho – 15 Junio 2010 – Portal     web: www.elmostrador.cl
[6] ¿Qué es el bicentenario? – Portal web: www.chilebicentenario.cl – Fecha: sin especificar
[7] Grupo: Vandalik, Disco: Vandalik, Cancion: Chile miseria, año 1989